Justo al norte de Dèas se encuentra el ducado de Salann Tir, el país de
las tierras saladas, frente al océano. Ahí, las tierras y los hombres
son levemente menos severos que los que habitan en Dèas, a pesar de
todo, ambos ducados son muy parecidos.
Al contrario que en
Dèas, el poder Real ha establecido un mayor arraigo en esta región. Un
gobernador nombrado por el mismo Rey se esfuerza por mantener la unidad
de los clanes bajo los colores de
Osta-Baille (la capital de Taol-Kaer); Vive en un castillo asomándose
sobre una pequeña ciudad frente al mar, cuya casa pertrecha un
acuartelamiento de caballeros Hilderin (la élite de caballeros de
Taol-Kaer). Me dijeron que podrían verse inmensas marismas de aguas
salobres, que hacen la fortuna de unos pocos agricultores. De cualquier
manera, en general, Salann Tir es un ducado relativamente pobre.
He aprendido de uno de los miembros de la delegación, con la que viajo,
que el gobernador actual es un teórico venido de las facultades de la
capital, muy inteligente pero inexperto. Nadie duda de su voluntariedad,
pero muchos lo encuentran incompetente y ha sido acusado de la última
hambruna sufrida, debido a su pobre gestión de los recursos.
No
puedo dejar de recomendaros, a vos, que visite los alineamientos de
Tùrsal; largas hileras de diferentes monolitos tallados con runas. Se
dice que es un lugar místico, venerado y protegido por los clanes
vecinos. Numerosas leyendas se narran sobre ellos; tales como una que
dice que esos monolitos son en realidad un ejército de monstruos
petrificados durante la época del Aergewin (tiempos pretéritos).
2 comentarios:
Bueno, ya que no juego a Esteren, por lo menos leo acerca de Esteren.
¡¡Haz de master a Esteren!!
Restallido de látigo.
Haz de master !!
Otro restallido.
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