2011/05/26

IRA





He de admitir que siempre me he considerado una persona tranquila.




Capaz de gobernar mis sentimientos y estados de ánimo hasta el punto incluso de sorprenderme por ello, quizá porque nací con ésa capacidad, quizá porque logré aprenderla durante el transcurso de mi existencia o simplemente gracias a algún tipo de extraña mutación que sufrí durante mi breve estancia en Orión.

Sin embargo, eso se acabó.

Confiado, creí que nunca me podría pasar. Y aunque me habían avisado –cuidado con los golpes de viento, a veces son traicioneros- acabé derribado, desorientado y sorprendido por un ansia de sangre capaz de engullir a mi interlocutor con una mirada.

Dejaré ése sentimiento para los momentos más oscuros de mis días, para los pocos que lo merezcan. Tratando de minimizarlos lo más posible, consciente de que son tan adictivos y capaces de mancillar todo lo que me rodee, especialmente, si lo aprecio...

Vuelvo a levantarme. –en peores te has visto, así que espabila- Cojeando, comienzo a caminar otra vez.

Tanelorn no se llega estando sentado.

6 comentarios:

:) dijo...

Es más normal de lo que parece. De hecho todos tenemos nuestros días o nuestras temporadas. ¡Si es que somos la hostia!
A veces perdemos la paciencia y la perspectiva.
Hay muchas soluciones mejores que atacar en la mayoria de los casos. Aunque hay veces en que es totalmente necesario.
Sin ir mas lejos la semana pasada tuve una discusión muy brusca y casi me salgo del tiesto. Y la culpa no fue mia,porque la otra persona me provoco y se salio del tiesto totalmente.
Hay veces que hay que mirar si compensa atacar, porque a lo mejor estan provocandonos para que reaccionemos de manera inapropiada y poder acusarnos de ello.
A veces es bueno pasar un poco de algunas cosas. Aunque cada vez consigo llevarlo mejor hay veces que soy humano y reacciono.
Yo le grito a los espejos, si no me quedo a mi aire (tras el cristal viendo la tormenta), o me tomo un par de vinos, una partida a un videojuego, un libro una serie... cualquier cosa que te haga EVADIRTE y que ese conflicto que te provoca ira no tenga apenas importancia (por lo menos hasta que vuelvas a ver a esa persona).

:) dijo...

Solo un apunte: ¡Que dificil de controlar es un sentimiento tan poderoso como la ira!

Ito ito dijo...

El problema casi siempre es que no es posible IGNORAR a alguien que estña en un estado emocional alterado (o revolucionado, como se quiera decir). Lo que sí se puede hacer es abandonar la escena y dejar que se calmen las cosas por sí mismas (y ni siquiera garantiza nada).

La otra opción es afrontar la situación mediante un férreo autocontrol y tratar de igualar posturas RAZONANDO.
De ésta manera puedes cosechar más éxitos o si no lo consigues: terribles fracasos, porque terminan por contagiarte su estado de ánimo.

:) dijo...

Totalmente deacuerdo
Solo que razonar a veces es muy complicado.
Ya sea por una parte, por la otra o por las dos.

Por mi parte, como soy un poco maligno, te reto a hacer un post titulado: PLACER
Es un tema, sin lugar a dudas, muy placentero.

:) dijo...

Por cierto, me gustaría saber que es lo que le han hecho al chico de la foto. ¡Tiene que ser un putadon!

HMJ dijo...

La ira conduce al odio y el odio conduce al lado obscuro!

La ira es un sentimiento poderoso, pero por intenso. De hecho es mucho mas primario que otros sentimientos. Los que somos un poco maniacos del control tenemos eso de que procuramos que la ira no nos lleve y nos quedamos en un cabreo de cojones y en la falta de racionalidad!